La ciudad Potemkin : la imbricación entre la transformación urbana y las economías criminales en Medellín a partir de los procesos de neoliberalización

Abstract

RESUMEN : La anomalía del caso de Medellín implica una imbricación entre el crimen organizado y la transformación urbana. El neoliberalismo como el motor que impulsó, y hasta cierto punto hizo necesaria dicha reciprocidad creando y rompiendo pactos entre los diversos actores y sus recursos dando como resultado unas prácticas de Estado en lo local particulares. El cambio de modelo económico de la ciudad, de una economía industrial a una economía de servicios, se impulsó con la intención de poner a Medellín como una ciudad de vanguardia, buscando desmarcarse de su pasado sangriento y estigmatizado por el narcotráfico. Con ello se propugnó por instaurar un modelo de ciudad inteligente, participativa, reforzando la tendencia hacia la planeación y la organización. El modo de producción capitalista encierra dentro de sí no solo la desigualdad como un a priori, sino que permite que los procesos de acumulación y reproducción de capitales se den casi por cualquier vía. Entonces, ¿Cuál es el papel de las economías criminales en los procesos de transformación de ciudad? La criminalidad y la transformación urbana de Medellín no son elementos aislados, sino que hacen parte del mismo proceso económico, el cual los hace indesligables. El papel de la ilegalidad/criminalidad es el de aprovechar un momento de acumulación para vigorizar de nuevo el sistema capitalista, es decir renueva el proceso de acumulación. Tales imbricaciones entre poder público y las organizaciones criminales no han desaparecido, estando presente en la toma de decisiones y en la dinámica diaria entre la sociedad civil y los actores políticos; las economías criminales son un apéndice insoslayable de la historia actual de la ciudad de Medellín y su transformación, lo cual altera la normal construcción y toma de decisiones en la política de la ciudad.