Efecto de un programa de entrenamiento de saltos horizontales comparado con saltos verticales en la fuerza y velocidad en deportistas de bádminton

Abstract

RESUMEN: El entrenamiento pliométrico es un método de trabajo muy aplicado en la preparación física actual, por su facilidad en la implementación y por los sobresalientes resultados obtenidos en diferentes variables de rendimiento, diversos autores como Ramírez, R. (2020), Sáez, E. (2009) Jiménez, D. (2019), Miller, G. (2016), Thomas, K. (2008), han estudiado los efectos del entrenamiento pliométrico con predominancia de saltos en el plano vertical, sobre diferentes variables de rendimiento como lo es el propio salto vertical, los saltos específicos de la modalidad, el salto horizontal, el sprint y la agilidad, hallando mejoras significativas en cada una de estas capacidades. Autores como Siff & Verkhoshansky, (2004) y Bosch & Cook, (2015) afirman que dentro del entrenamiento de la fuerza existe la correspondencia dinámica como factor de especificidad, indicando que como principio del entrenamiento se debe buscar la mayor especificidad posible, teniendo en cuenta que las acciones de sprint en línea recta, sprint con cambios de dirección y saltos específicos del futbol de salón, presentan un componente de producción de fuerza en vector horizontal. Nagahara, R. (2018), surge la inquietud de si una intervención con saltos horizontales podría tener un mayor efecto sobre estas variables, en comparación a una tradicional con saltos verticales. El objetivo de este estudio es identificar el efecto de un programa de entrenamiento de saltos horizontales, comparado con un programa de saltos verticales, en el desarrollo de la fuerza muscular, el sprint, el salto vertical y horizontal, en deportistas. La muestra será de 14 deportistas de altos logros, pertenecientes a la selección Antioquia de bádminton, con un promedio de edad de 21 años, con experiencia deportiva en la modalidad de más de 4 años. Las intervenciones se realizarán durante un periodo de 6 semanas, con una frecuencia de 2 sesiones por semana, posterior a la parte inicial de la sesión, como elemento de trabajo de la preparación física, con progresión de la carga intersemanal.