Después de todo quiero permitirme ser, sin tapujos. Análisis sobre las modificaciones corporales e implicaciones en el autoconcepto de paisanas de Bogotá, Medellín y Chocó

Abstract

RESUMEN: Las modificaciones corporales que mis paisanas y yo nos realizamos las enmarco en la violencia estética, un tipo de violencia que no ha sido tipificado como tal y que como otro tipo de violencias ha sido normalizada. La normalización de este tipo de violencia se encuentra interconectada a su vez con otros tipos de violencia como el racismo estructural y la misogynoir. Las modificaciones corporales identificadas fueron: modificaciones corporales sobre los senos, modificaciones corporales sobre la piel, modificaciones corporales sobre el cabello, modificaciones en la morfología corporal y modificaciones en el tono de voz y acento; todas ellas han tenido gran efecto sobre el autoconcepto de mis paisanas y yo, dado que cumplir con el canon de belleza establecido por occidente, está acompañado de sentimientos de tristeza, insuficiencia, culpa y rechazo hacia nosotras mismas. Durante esta investigación también ha sido posible identificar como la salud mental se ha convertido en un negocio en el que no solo es un privilegio acceder, sino que también, las industrias de la moda, cosmética, pornografía, juguetería, médica y farmacéutica se han filtrado en ella para ejecutar sus negocios y así, replicar el modelo de belleza hegemónico. Sin embargo, y sin ánimo de romantizar la situación, las juntanzas entre paisanas y herramientas como el afrofeminismo han permitido que mis paisanas y yo hablemos de lo que yo he llamado «lo que somos ahora».

ABSTRACT: I frame the body modifications that my paisanas and I perform on ourselves as aesthetic violence, a type of violence that has not been typified as such and that, like other types of violence, has been normalized. The normalization of this type of violence is in turn interconnected with other types of violence such as structural racism and misogynoir. The body modifications identified were: body modifications on the breasts, body modifications on the skin, body modifications on the hair, modifications on the body morphology and modifications on the tone of voice and accent; all of them having a great effect on the self-concept of my paisanas and myself, given that complying with the beauty canon established by the West is accompanied by feelings of sadness, insufficiency, guilt and rejection towards ourselves. During this research it has also been possible to identify how mental health has become a business in which it is not only a privilege to access, but also, fashion, cosmetics, pornography, toys, medical and pharmaceutical industries have filtered into it to run their businesses and also, replicate the hegemonic beauty model. However, and without wishing to romanticize the situation, the meetings between countrywomen and tools such as afrofeminism have allowed my countrywomen and I to talk about what I have called «what we are now».